Acogedor y “casero” son las primeras dos palabras que se me vinieron a la cabeza cuando llegué a este rico café en Vitacura. Un restaurante de familia, que debe su nombre “Café Bajo el Nogal”, gracias a un hermoso árbol que se encuentra en el patio trasero. Un lugar imperdible en verano y primavera. Apenas entramos al local, Pepe – el dueño - junto a su hijo y chef Pablo Sologuren nos recibieron para primero que todo mostrarnos el lugar. Una casa que adaptaron para cumplir su sueño de tener un restaurante y que cuenta con varios salones, para el gusto de todo cliente. Está el salón principal, un rincón familiar - con fotos que cuentan la historia de la familia Soloudre - dos privados para reuniones o eventos particulares y por supuesto una terraza al aire libre.
Como éramos dos, nos instalamos en la especial mesa del rincón familiar, rodeadas de fotos antiguas con escenarios desde Alemania a Valparaíso, que narraban la travesía que como familia hicieron antes de instalarse en Santiago con este restaurante.
Ya sentadas e inmersas imaginando esas historias, se nos acercó Libardo, un mozo colombiano que en pocos minutos nos convenció que probáramos el menú del día. Así, llegó a nuestra mesa un rico jugo de frambuesa natural y al poquito rato, un consomé de verduras.
Era un sábado de invierno, por lo que la sopa fue lejos la mejor manera de comenzar el almuerzo. Muy sabrosa y bien condimentada. Luego, de plato de fondo, haciendo honor a sus raíces, probamos un rico lomo saltado. Con la porción justa de arroz y papas cosa de poder dejar limpio el plato.
Como no hay almuerzo de casa sin postre, igual a esas reuniones familiares de chica, nos llegó un sabroso bavaroise de frambuesa, junto a una agüita de limón y menta natural. ¡Imposible que no se te vengan esos recuerdos de familia a la cabeza!
Una vez que terminamos el almuerzo, nos pusimos a recorrer un poco más y aprovechamos de mirar el Emporio que tienen a un costado del restaurante. Con productos naturales y chilenos, tienen todo lo que puedan imaginar. Desde comida a productos de belleza. Créanme cuando les digo que nos queríamos comprar ¡Todo!
Fue tanto lo que nos absorbió el Emporio y entre conversa y conversa para conocer un poco más de la familia, que pasó la hora y no encontramos nada mejor que quedarnos a tomar té ahí mismo. Ya habíamos ojeado la carta y nos tentamos con un par de cosas.
Así, entre todas las opciones de “onces”, finalmente nos decidimos a compartir la “Light”, que venía con una rica ensalada de frutas. ¡Simplemente delicioso! Por supuesto un café para acompañar, y pasamos la tarde conversando en este acogedor lugar. Definitivamente, la elección perfecta para sentirse como en casa.
Dirección: Luis Pasteur 5774, Vitacura
Teléfono:22190399
Facebook:https://www.facebook.com/mercaditodelaabundancia
Isidora Centeno O.
Periodista, colaboradora de Chile Gastronomía
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