Salvo excepciones, la gran mayoría de los seres humanos ama el
chocolate. En todas o alguna de sus
formas y variedades, el
chocolate cautiva a grandes y chicos. Está presente en celebraciones y festejos, pero también como postre en la cena. Antes de dormir o para levantar el ánimo cuando atravesamos un mal momento.
Desde un preciado
Ferrero Rocher guardado para una ocasión especial, hasta un alfajor medio derretido en la cartera o el bolsillo. Cualquier producto de o con chocolate, puede saciar el deseo o antojo de las grandes masas de golosos.
Cuando las ganas golpean nuestra puerta, los
bombones Ferrero Rocher pueden transformarse casi en un remedio para una enfermedad. Para los que tienen control, la dosis justa de dulzor. Para los que no, la posibilidad de comer uno tras otro en un atracón sin límite.
Del mismo modo, en medio de un antojo, toparse con uno de los locales de
Varsovienne puede ser un momento de felicidad absoluta. Recorrer las góndolas pensando con cuál de sus productos nos vamos a deleitar, puede ser una experiencia insuperable cuando necesitamos de inmediato un chocolate. Incluso si somos diabéticos y/o veganos.
También con poca plata en el bolsillo, un pequeño pero satisfactorio
Ferrero Rocher precio accesible o un
Varsovienne descuento alcanzarán para colmar las terribles ganas de comer chocolate.
El Consumo de Chocolate
Según un informe de 2020 de ICEX España Exportación e Inversiones, tanto la importación como el consumo de chocolate en Chile, se han incrementado desde 2018. Se posiciona como el país latinoamericano que más chocolate consume, secundado por Brasil. Además, crece un 25% anual la venta del chocolates con 70% de cacao.
Como en otras regiones del mundo, este crecimiento convive con los cambios en las tendencias y los hábitos alimenticios. Además de la Ley de Etiquetado de Alimentos, que provocó búsquedas más saludables en materia de comidas y bebidas, el mercado debe responder a la demanda de las personas diabéticas y al creciente veganismo.
La necesidad de consumir alimentos sin azúcar de quienes padecen diabetes así como la aparición paulatina pero incesante de personas veganas, presentan nuevos desafíos. También en el rubro de los chocolates.
En este contexto, aparecen cada vez más productos reducidos en azúcares y elaborados con materias primas no derivadas de animales, que bien pueden alcanzar el sabor de un gustoso
chocolate Ferrero Rocher.
Chocolates Sin Azúcar
Normalmente al digerir los alimentos que comemos la glucosa se distribuye en todo el organismo y es utilizada como fuente de energía para funcionar. Pero, para que ingrese en nuestras células necesita de una hormona producida por el páncreas llamada
insulina.
Las personas diabéticas presentan una alteración en la producción de la insulina que deja a la glucosa afuera de las células y hace que se acumule en el sistema sanguíneo. Por eso es que presentan niveles altos de azúcar en la sangre. Dado que esta hiperglucemia sostenida puede afectar a diferentes órganos vitales, el paciente debe llevar adelante un tratamiento adecuado y disminuir el consumo de azúcares.
Afortunadamente, hoy por hoy, el mercado ofrece varias
alternativas para los diabéticos en materia de bebidas y comestibles, incluso para momentos de antojo. Entre los
chocolates Varsovienne, es posible encontrar más de una opción sin azúcar.
Con la misma garantía de calidad de los
bombones Varsovienne, la
chocolatería ofrece la
Barra Milk 36%, una mezcla de cacaos de Ghana, Costa de Marfil y Colombia sin azúcar añadida. También, propone la
Barra Bitter 57% de cacao tipo criollo del país Venezolano que se endulza con maltitol.
Con cacaos de Ghana, Costa de Marfil y Colombia y endulzado con sucralosa, el
Macizo Leche 36% se presenta como otra alternativa de la reconocida marca para los diabéticos, así como la nueva línea de bombones. Además para estas Pascuas elaboró una línea de huevos y conejos de chocolate sin azúcar.
Chocolates en Versión Vegana
En pos del
cuidado de la salud y el medio ambiente, durante los últimos años hay una tendencia hacia lo natural. Las personas intentan tener hábitos más saludables y acompañar la actividad física con alimentos más naturales, con menos grasa, con más fibra y libres de ingredientes de origen animal. Un consumo más consciente incluso a la hora darse un gustito.
El
veganismo es un modo de vida que promulga el respeto a los animales como seres sintientes y busca evitar dañarlos, directa o indirectamente. Veda la caza y la pesca, y promueve el consumo de productos que no requieran el sacrificio animal en ningún momento de su procesamiento. Esta ideología abarca tanto a la indumentaria como a la cosmética y la alimentación.
La base del chocolate comúnmente conocido se obtiene de la mezcla de la masa del cacao y la manteca de cacao, derivados de la planta, y el azúcar. A partir de ahí, algunos contendrán además leche, esencias o frutos secos, entre otros añadidos. Generalmente los
chocolates veganos suelen ser oscuros de
100% cacao. Las otras recetas pueden incluir ingredientes lácteos, miel, grasa animal y huevo.
La
demanda vegana ha obligado al mercado a incorporar productos sin ingredientes de origen animal y a etiquetarlos de manera tal que el consumidor pueda identificarlos. Y en consonancia con ello,
Varsovienne dispone de una
línea especial para sus
clientes veganos.
Con la correspondiente etiqueta, la empresa chocolatera ofrece cajas de
Macizo Bitter 63% y
Macizo Bitter 57% sin azúcar y las
barras Bitter 57% sin azúcar,
Abinao 85% y
Bitter El Ceibo 85%.
Cuidar el medio ambiente y la salud no puede ser incompatible con
alimentarnos bien y de la manera que elegimos. Actualmente el mercado nos brinda la posibilidad de sostener nuestro plan alimenticio accediendo a productos de calidad. Y sin dudas esta nueva demanda encontrará una oferta cada vez más variada.
Son muchas las empresas que adoptaron mecanismos de producción orientados a la
sustentabilidad. Con ese fin, obtienen de las materias primas atendiendo al uso responsable del agua y el suelo y realiza sus embalajes con materiales reciclables como el papel y el cartón, abandonando el plástico.