Poco más de 6 meses de apertura tiene
Kilú,
un proyecto gastronómico que se autodenomina Casa de Carnes y que ofrece una experiencia monoproducto, es decir, una propuesta donde se enfocan y especializan en sólo un alimento y lo manejan de la mejor forma posible, en este caso
el protagonista indiscutido es la carne.
La oferta incluye específicamente
tres cortes de vacuno: costaleta de lomo vetado, costaleta de lomo liso y entrecot (T-Bone), cada uno cuidadosamente seleccionado, a los cuales se suman otras opciones como por ejemplo entraña, punta picana u otros, como productos invitados, que irán rotando mes a mes.

El concepto de este nuevo local ubicado en
calle José Manuel Infante #28, Providencia, es claro y sin mayores complejidades, según comenta
Felipe Guerra, uno de los cinco socios de este innovador concepto:
servir un trozo de carne de 1 kilo de máxima calidad, proveniente del sur de Chile o de la pampa Argentina, por un precio único de $42.000 mil pesos y que puede ser consumido de manera individual o para compartir.
En cuanto a los acompañamientos, la regla es casi la misma y
se ofrecen dos opciones fijas: papas fritas y mix de hojas verdes, ambos incluidos con cada corte de carne, además de una entrada de cortesía que viene de la mano de los parrilleros.
La coctelería de autor del restaurant es otro punto a favor y que suma, sin lugar a dudas. A cargo de la barra está el bartender
Ángelo Rojas,
con amplia trayectoria en otros conocidos lugares como Mestizo, Casa Luz, Carre Nou, entre otros y que hoy día, saca a relucir todo su repertorio para ofrecer bebestibles únicos y alucinantes, como el
Kulczewski, con campari, tequila, zumo de limón y un syrup de cacho de cabra, adornado con un trozo de tocino caramelizado, o el Sour del Pacífico, 28 Verde, Azarosa y José Manuel, cada uno preparado en el minuto y presentado de manera cuidadosa y atractiva.
El restaurant
Kilú es elegante, pero a la vez acogedor, donde nada parece estar al azar.
Cuenta con dos salones, uno de ellos para compartir en pareja y otro con la opción de disfrutar en grupo con una capacidad total de 42 comensales.
“La apuesta de Kilú nace de un viaje a España donde pude conocer distintos lugares que se especializaban en un solo producto. Una vez en Chile, recordé mi gusto por la preparación de carnes ahumadas y me junté con mis actuales socios, quienes también comparten mi pasión por las parrillas.
Para nosotros disfrutar de una buena carne es más que solo comer: es una experiencia que conecta, emociona y celebra los placeres simples de la vida”, explica Guerra.
Kilú, Casa de Carnes,
funciona de lunes a sábado de 19:00 a 00:30 horas.
Atentos a las novedades que se vienen para mayo, donde debutarán con almuerzos.
@kilucasadecarnes
Texto:
Álvaro Bustos Barrera
Fotos:
@lamediafoto