LA JARDINERA, COCINA FUSIÓN CON AIRES HOGAREÑOS EN PUERTO VARAS Y SANTIAGO.

Inspirada en los gastropub ingleses, La Jardinera se ubica en Blanco Encalada 1160 en Puerto Varas y recientemente ha abierto sus puertas en Santiago, en pleno Barrio Italia en la calle Condell 1701, propone un concepto gastronómico particular. Nos hemos aventurado y quisimos conocer el original como su nueva apuesta en la capital.

En una bella casa de fachada color celeste, La Jardinera secretamente –ya que no está ubicada en la costanera como la mayoría de los restaurantes– atrae a fieles y nuevos comensales en Puerto Varas. Entrar a La Jardinera es volver a la casa de la abuela, donde el olor a pan caliente penetra rápidamente por la nariz, la calidez de la estufa, la alacena al costado, una ventana de marco blanco por donde suavemente se cuela el sol de invierno dan lugar a una experiencia culinaria acogedora.

Fuimos recibidos por Rodrigo Trabucco, gestor de La Jardinera, quien trajo desde Inglaterra junto a su señora, Magda Saleh, los sabores y recetas recolectadas desde las frías tierras del norte.

Pero si cree que éste sería un restaurant al más puro tea-time-english-style, está equivocado. Si bien hay algunos platos al estilo inglés, lo que aquí abunda es una fauna gastronómica. Rodrigo trabajó con muchos tailandeses y árabes por lo que no es de extrañarse que en esta escueta carta –contando con solo 26 preparaciones– aparezcan platos muy diferentes y de diversos orígenes.

Esto es justamente lo que hace de La Jardinera un lugar particular: un ambiente que envuelve con una calidez nostálgica y un contenido de preparaciones exóticas y sorpresivas.

Su local en Santiago, también recoge esta misma esencia, trayendo consigo los mismos enseres originales del mueblista de Puerto Varas –destacando por sobre todo la lámpara de troncos de alerces–. La carta es la misma, el chef, Víctor Cervantes fue entrenado durante toda una temporada para llevar a la capital los mismos sabores de la ciudad del Lago Llanquihue. 

Ya instalados en la mesa, con la ventana detrás y el sol cayendo sobre mi espalda, nos traen unos exquisitos panes amasados. Para partir nos presentaron una Tabla Thai con brochetas de pollo y salsa de maní, rollos de papel de arroz con camarón y albahaca y menta, curry de camarón y salsa de jengibre y naranja. Una preparación equilibrada, sabrosa, fresca y chispeante. Mientras que en Santiago probamos las Croquetas de jaiba con mayonesa merkén. Ambos platos especiales e ideales para partir una experiencia gastronómica al puro estilo La Jardinera.

Luego probamos un tierno Salmón sellado con costra de pistacho sobre risotto de centolla. Rico, equilibrado, el risotto suave y aterciopelado como debe ser, pero la sorpresa viene en el fondo (disculpe querido hambriento lector si le adelanto el final) bajo el risotto se esconden pinzas de centolla.

En paralelo, mi acompañante pidió un Lomo envuelto en tocino sobre papas, ragout de champiñones y reducción de cassis. Éste en contraste a la suavidad del plato anterior, es un plato fuerte y con carácter, la carne en el mejor de sus puntos, el tocino entregándole el sabor a su alrededor, pero las papas y champiñones se llevan casi todos sus créditos con sus sabores y texturas posicionando a este plato uno de los mejores de este restaurant.

En la capital nos aventuramos hacia el lado thai y probamos el Curry verde de camarones y arroz blanco y el Pollo Tikka Masala con arroz bastami. Ambos platos perfectamente preparados y equilibrados, cada uno con su carácter distinto y de muy alto nivel. Simplemente exquisitos.

Como verán, cocina fusión sería poco decir para este restaurant, pero en nuestra experiencia y aventura por las diferentes preparaciones podríamos resumir a La Jardinera en un plato que no suele ser el punto más álgido de los restaurantes: El postre.

Tan alto fue el punto que repetimos el postre en Puerto Varas y Santiago. En algún sentido, queríamos comprobar que era un sueño irrepetible o que podía fallar, mas nos equivocamos. Hablo del Sticky Toffee Pudding. Éste es un clásico postre inglés que consiste en un suave bizcocho pegajoso con dátiles y vertido sobre éste una suave salsa de toffee caliente y acompañado de una bola de helado.

Pero en La Jardinera no hacen la traducción literal: es un Sticky Pudding chilenizado. En vez de dátiles nos encontramos con ciruelas deshidratas y a cambio de toffee, qué más ni menos que nuestra amada chancaca aparece. Este es un plato que desde su primera cucharada hizo abrir nuestros ojos y sonreír. Fusión perfecta, directa, poco pomposa, a veces extraña, algo de la receta de la abuela, de tierras lejanas y de Chile, eso es este postre y por qué no, La Jardinera.

Puerto Varas: Blanco Encalada 1160, Puerto Chico, Puerto Varas

Reservas: 065-2231684

Santiago: Condell 1701, Barrio Italia, Santiago

Reservas: +562-29047068

Sitio Web: www.lajardinera.cl

Fan Page: La Jardinera Gastropub